A mi me transmite agobio, asfixia. Como si estuviera atrapado en una cueva, como si tuviera que reptar y arañarme el cuerpo contra las piedras para poder salir. Como si me viera obligado a soltar el aire de mis pulmones para poder pasar por un angosto agujero.
¡¡Jajajajaja!! Y donde hacen las juntas de vecinos? En el calderón?? Como para hacerla en el piso del presidente!!, con canapés para todos!! Ya me veo a la señora Mari Pili untando paté 10 horas antes de la reunión!!
4 comentarios:
A mi me transmite agobio, asfixia. Como si estuviera atrapado en una cueva, como si tuviera que reptar y arañarme el cuerpo contra las piedras para poder salir. Como si me viera obligado a soltar el aire de mis pulmones para poder pasar por un angosto agujero.
Interesante Torcuato, coincido contigo en varios puntos. Quizá una alegoría del día a día de cualquiera de nosotros... ;)
Me alegra saber de tí.
Un abrazo, padrazo!
A mi me resultaria muy intimidatorio vivir así. Aunque pensándolo bien, surgirian mil historias que contar en un blog.
Imagínate una junta de vecinos, debe ser lo más parecido a un Juicio en La Haya!!
¡¡Jajajajaja!! Y donde hacen las juntas de vecinos? En el calderón?? Como para hacerla en el piso del presidente!!, con canapés para todos!! Ya me veo a la señora Mari Pili untando paté 10 horas antes de la reunión!!
Besos Doctora!!
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