28 agosto 2007

Historias del Suburbano

Por la mañana, temprano, si vas en metro sueles coincidir con la misma gente más de una vez... supongo que el motivo será el " horario laboral "... Hoy, en la misma parada de siempre, la del Conde de Belascoain, ha vuelto a subirse en el último vagón, y hoy, como siempre, ha vuelto a bajarse 3 paradas después. Con su pelo corto y su bolso de los de Liverpool, su ropa con lunares y sus ojos de un color que no puedo explicar, con su estilo propio y su forma de mirar. Me encantaría saber qué música va escuchando, siempre va con los cascos, como muchos de los que vamos en ese que "vuela". Siempre con esa "seriedad" que le da ese toque interesante... se ha vuelto a subir y se ha vuelto a bajar, esa persona con la que creo que debe ser interesante hablar... con los de Liverpool, con los lunares, con sus ojos de un color que no puedo explicar...

3 comentarios:

*Angulin* dijo...

JeJe... ¡Cuántas veces me habré enamorao yo en un transporte público!... Me encantan esos amores fugaces e imposibles... Pero... ¿porqué no le dices algo algún día? ;)

Un Gran Abrazo, Canijo!

♥ La Haine ♥ dijo...

este post parece mío!! cuántas veces me he llegado a obsesionar conalguien que parece tan igual a mí y a mi estilo en el metro... son de los mejores momentos del dia :)
un besito

Anónimo dijo...

¿Con lunares y con los Betles? Globalización al Power!!!

Si os gustan las vidas extrañas, la profundidad del metro y su reflejo en las personalidades ( y mil historias y cosas raras y no se qué....

Bueno que me lio, que os recomiendo el libro de Juan Luis Chaparro: Nosotros, la armada.

Escritor joven. Esta es su primera novela y os aseguro que os encantará.

Saludos.